Audio Distribuido. El gran desconocido.

¿ Audio Distribuido ?. Quizás habremos escuchado este término cuando hemos solicitado información en algún establecimiento, o bien en internet, porque se nos ha ocurrido la genial idea de poner música en nuestra vivienda.

Hemos pensado, ya que nos estamos construyendo nuestra nueva casa o acometiendo una pequeña reforma en nuestro hogar. Porque no poner unos altavoces en nuestra habitación, en nuestro baño, en la cocina y en el salón. De esta forma tendríamos música en esas zonas, y no tendría que llevarme el radiocasete de mi hijo cada vez que decido darme un baño relajante con un poco de música.

Algo así, con ciertos matices,  es lo que llamamos audio distribuido. Es una idea genial el pensar en instalarlo a la hora de reformar tu vivienda o construirte una nueva casa, es el momento adecuado.

Cuando hablamos de audio distribuido, no estamos hablando de hilo musical, o sonido ambiental. Quizás sea este concepto que más pudiéramos conocer,  y el cual pueda llevarnos a equivocaciones en el concepto fundamental. Sobre todo, al intentar compararlo con audio distribuido.

La principal diferencia del audio distribuido con respecto al sonido ambiental o hilo musical, es la calidad de sonido. Ni mucho menos, la calidad de un sonido ambiental o hilo musical, la podemos comparar con la de un sistema de audio distribuido. Cuando hablamos de audio distribuido, estamos hablando de una elevada calidad, una alta fidelidad.

Otra de las diferencias fundamentales es la potencia. Mientras que en un sistema de audio distribuido hablamos de potencias de 20 a 40w habitualmente por altavoz. En un sistema de hilo musical estamos hablando de 1,5 w a 3 w, y excepcionales ocasiones hasta 5w. Si quisiéramos una mayor potencia, ya estaríamos hablando de sistemas de megafonía, con la mala calidad que muchos de nosotros habitualmente hemos sufrido en alguna universidad, empresa, centro comercial, …

Por poner una comparación, un hilo musical es como un radio casette de mano, frente al audio distribuido que sería la cadena de alta fidelidad.

Básicamente en un sistema de audio distribuido, disponemos de unas fuentes de sonido: Un equipo de CDs, una radio, un MP3, … unos altavoces en cada una de las zonas, habitualmente dos, aunque dependerá del volumen de la zona, y un teclado por cada una de las zonas o estancias a sonorizar.

Lo bueno de un sistema de audio distribuido, es que podemos compartir recursos. Es decir, si disponemos de un equipo de almacenamiento donde tengamos toda nuestra biblioteca de música y la de toda la familia, podemos escuchar diferentes canciones en diferentes lugares y con diferentes volúmenes.

A través de los teclados, podemos controlar el volumen en cada una de las diferentes estancias, seleccionar la fuente de sonido, y comandar los equipos: Play, avance, retroceso, seleccionar emisora, …. Cada vez es más habitual, disponer en cada teclado,  del título de la canción, autor y en algunos casos incluso hasta de una carátula gráfica del CD o del autor.

¡ Esto sí que es un auténtico sistema de audio distribuido.¡

¿ Sabias realmente la diferencia ? ¿ Hemos podido ayudarte con tu compra ?