Coches inteligentes, una nueva opción
Estamos rodeados de avances tecnológicos que nos facilitan la vida. Es habitual hablar de teléfonos, oficinas, robots u hogares inteligentes; es la tecnología puesta al servicio del hombre para que todo su entorno sea más cómodo, seguro y con mayor ahorro energético.
Actualmente no nos sorprende que nuestros hogares tengan instalados sistemas de gestión de calefacción, alarma y electrodomésticos que se controlan desde un mismo dispositivo a distancia. Pero quizá si nos llama la atención que nuestro vehículo lleve de serie sistemas o mecanismos que nos ayuden a conducir adecuadamente o nos avisen ante un despiste.
En este artículo descubriremos que son muchos los modelos de automóvil que incluyen de serie, aunque algunas opciones siguen siendo opcionales, avances tecnológicos que convierten nuestro auto en un ser inteligente.
Algunos modelos cuenta con un sistema de corrección al volante que detecta si el conductor está distraído, en cuyo caso le avisa o bien a través del panel de la pantalla digital bien con una vibración al volante. En ocasiones incorpora unos sensores seguidores de líneas blancas continuas y discontinuas, de tal forma que si pisamos éstas y no marcamos el intermitente, el sistema lo interpreta como un cambio de carril involuntario y nos avisa o gira ligeramente el volante al lado contrario Para evitar que un coche conduzca en sentido contrario a través de un sistema de GPS se avisa al conductor de que se va a incorporar a una vía de sentido contrario, así como envía una señal a los vehículos con sistema de comunicación de600 metros a la redonda e incluso a tráfico.
Otro de los problemas habituales que hay en los coches son los ángulos muertos; para finalizar con ellos estos coches llevan instalados sensores que avisan con una señal visual en el retrovisor de un posible obstáculo.
Las cámaras de reconocimiento de señal y velocidad indican constantemente, y actualizándose en tiempo real, de la velocidad máxima en la pantalla digital a la que se puede circular para los más despistados. Actualmente es más habitual que de serie incorpore un sistema de regulación de la velocidad, es decir, programamos a qué velocidad constante queremos ir y el coche se mantiene en ella, para acelerar o desacelerar sólo hay que pisar freno o acelerador y se desactiva el sistema. Incluso algunos modelos incorporan que mantenga la distancia óptima con otro vehículo.
Otros sistemas de seguridad que pueden incorporar son: cámaras que ven lo que el conductor no ve; frenado automático ante un obstáculo; o mensaje de aviso de emergencia a vehículos cercanos.