Sistemas de iluminación para ahorrar en la factura eléctrica.

En los tiempos que corren es fundamental tomar conciencia acerca de los cambios climáticos y adoptar hábitos que contribuyan a reducir el impacto ambiental de las grandes metropolis.

En los edificios inteligentes, en las empresas, la iluminación es la segunda fuente de gasto de energía.

La domótica o inmótica, dependiendo de su ámbito de actuación, ofrece sistemas que tienden a aumentar el confort en todo lo relacionado con la iluminación al mismo tiempo que regula su uso disminuyendo notoriamente el consumo.

Estos sistemas de iluminación inteligentes le permitirá generar los ambientes propicios para la ocasión que celebre en su oficina u hogar.

En el caso concreto de las empresas los beneficios son amplios: Usted podrá regular la intensidad de la luz tanto para una conferencia en un ámbito luminoso, o para la proyección de un audiovisual donde necesitará una luz tenue; mejora la calidad de trabajo de sus empleados, sobre todo aquellos que pasan muchas horas frente al ordenador, reduciendo la incomodidad que genera el brillo de los monitores o el cansancio en la vista por una luz inapropiada.

Respecto al consumo, estos sistemas optimizan el uso que se le da a la luz a través de sus sensores, captan la presencia de alguien y encienden las luces, pero cuando dejan de captar a la o las personas, las apagan. De este modo el uso de la iluminación es estrictamente para cuando hay personas en un recinto. Esta función es muy interesante ya que, con una manipulación manual de la luz, muchas veces las personas olvidan apagar el interruptor y se produce un derroche innecesario.

Otra forma de contribuir al ahorro de energía es programando la apertura y cierre de estores, cortinas, persianas y ventanas de acuerdo al sol que se proyecta sobre la fachada ese día. Si es un día soleado, no es necesario utilizar la luz eléctrica.

Un detalle muy importante para tener en cuenta a la hora de decidirse a instalar estos sistemas domóticos o inmóticos es que contribuyen a la seguridad del área privada.

Poseen sensores que detectan la presencia de las personas y se programan con el horario de la jornada laboral o el periodo de tiempo diario en que hay gente en ese edificio. De este modo si los sensores captan una presencia en un rango horario fuera del programado activan un sistema de alarma para avisar a la seguridad del edificio. El sistema informará de esta irregularidad directamente a los teléfonos móviles programados, al display de información o al monitor donde se encuentra la seguridad privada.

Los sistemas de iluminación integrales contribuyendo a la seguridad, al confort y al ahorro de energía.