La domótica es la solución al aumento excesivo en el número de mecanismos o llaves

La incorporación de la domótica a nuestras vidas y hogares hace que nos comencemos a replantear conceptos que con anterioridad dábamos por hecho, sin reparar en ellos. Uno de los conceptos a llevar a revisión es la correcta utilización de las nuevas “llaves, teclas,  mecanismos o chismes” o  como deseemos llamarlos.

La domótica es la solución al aumento excesivo en el número de mecanismos o llaves, en las nuevas casas inteligentes.

Poco a poco, la vivienda a lo largo de los tiempos han ido aumentando el número de puntos de luz. Lejos están aquellos tiempos donde los pioneros de incorporar una nueva tecnología a la vivienda llamada “electricidad”, disponían de una única bombilla por estancia.

Ahora no es extraño encontrarnos en nuestra habitación de matrimonio tres circuitos independientes que iluminan una serie de tres, cuatro o cinco lámparas halógenas como iluminación general de la habitación,  y otros dos circuitos con iluminaciones independientes, posiblemente por una lámpara de píe y dos lámparas de mesilla. Y eso tan sólo en la habitación, que si nos fijamos en el salón podemos tener sin despeinarnos cinco, seis e incluso hasta siete circuitos independientes, con sus muchas luminarias.

Además no sólo encendemos y apagamos desde un único punto cada circuito de iluminación, nos hemos hecho cómodos y queremos encenderlo y apagarlo desde: la puerta de entrada de la habitación, desde el acceso al baño y desde el lado izquierdo y derecho de la cama. Por si fuera poco a las nuevas casas del futuro y ya presente les incluimos motorización de persianas, estores y toldos; el número de mecanismos o llaves aumenta considerablemente y se hace necesario un estudio pormenorizado y la domótica es la solución.

Debido a este aumento considerable en el número de circuitos de iluminación y motorizaciones a controlar, suele ser habitual encontrarnos viviendas donde no han considerado la instalación de ningún sistema de control de domótica, con una instalación de electricidad tradicional con multitud de llaves, interruptores y mecanismos dispuestos en varias filas y columnas.

¡ Una auténtica locura ¡ y la domótica es la solución.